La serie ‘Legado’, que se estrena en Netflix el 16 de mayo, ha generado una gran expectación en el panorama audiovisual español. Creada por Carlos Montero, Pablo Alén y Breixo Corral, esta producción se presenta como una adaptación de las dinámicas familiares y empresariales que han caracterizado a éxitos internacionales como ‘Succession’. Con un elenco liderado por José Coronado, la serie promete explorar las complejidades de una familia poderosa en el mundo de los medios de comunicación, pero ¿logrará captar la esencia de su inspiración o se quedará en un intento fallido?
### La Trama y los Personajes
‘Legado’ se centra en la familia Seligman, dueña de un influyente grupo mediático en España. Federico Seligman, interpretado por Coronado, es un patriarca que ha perdido el control de su periódico, ‘El Báltico’, mientras su hijo Andrés, encarnado por Diego Martín, intenta mantenerlo a flote a través de métodos poco ortodoxos. La serie se desarrolla en un contexto donde la ambición y la traición son moneda corriente, y cada miembro de la familia está dispuesto a luchar por su parte del pastel.
Los Seligman son un reflejo de los Roy de ‘Succession’, pero con un giro español. Cada uno de los cuatro hermanos, incluyendo a Yolanda (Belén Cuesta) y Lupe (Natalia Huarte), tiene su propio papel en el conglomerado familiar y en un partido político de izquierdas, lo que añade una capa de complejidad a la narrativa. Sin embargo, a pesar de las similitudes, ‘Legado’ enfrenta el desafío de diferenciarse y ofrecer algo fresco al espectador.
La serie aborda temas como la corrupción, el poder y la lucha por el honor familiar, pero a menudo se siente como un reflejo superficial de la realidad política actual en España. Las referencias a figuras políticas contemporáneas son evidentes, lo que puede resultar en una experiencia confusa para el espectador que busca una crítica más profunda y matizada.
### Comparaciones y Críticas
Es innegable que ‘Legado’ intenta emular el éxito de ‘Succession’, pero esta búsqueda de similitudes puede jugar en su contra. La serie parece estar atrapada en un ciclo de imitación, donde los guionistas se esfuerzan tanto por replicar el estilo y la tensión de la serie original que pierden su propia voz. Esta falta de originalidad se traduce en tramas que, aunque entretenidas, carecen de la profundidad y el peso emocional que caracterizan a su predecesora.
Los giros de guion, aunque sorprendentes en algunos momentos, a menudo se sienten forzados y poco naturales. La velocidad a la que se desarrollan los eventos puede resultar abrumadora, lo que lleva a una experiencia de visualización que, en lugar de ser cautivadora, se convierte en un ejercicio de distracción. La serie parece temer que los espectadores se aburran, lo que resulta en una narrativa que se siente apresurada y, en ocasiones, superficial.
A pesar de estas críticas, ‘Legado’ logra mantener un nivel de entretenimiento que no debe ser subestimado. La actuación de Coronado, en particular, aporta una complejidad al personaje de Federico Seligman que es digna de mención. Su interpretación evoca ecos de personajes anteriores en su carrera, lo que añade una capa de profundidad a su papel. Sin embargo, esto no es suficiente para elevar la serie a la altura de sus aspiraciones.
En resumen, ‘Legado’ es un intento ambicioso de capturar la esencia de ‘Succession’, pero se enfrenta a la difícil tarea de destacar en un panorama saturado de imitaciones. La serie tiene el potencial de entretener, pero su falta de originalidad y profundidad puede limitar su atractivo a largo plazo. A medida que se adentra en su narrativa, los espectadores se verán obligados a decidir si prefieren una copia de un éxito probado o una historia que ofrezca algo verdaderamente nuevo y emocionante.