Un incendio de grandes proporciones ha sacudido la playa de Gandia en la mañana del 3 de octubre de 2025, dejando un saldo de 14 heridos y un edificio completamente evacuado. Las llamas, que comenzaron en la planta baja de un inmueble en la calle Castilla la Mancha, se propagaron rápidamente, atrapando a varios vecinos en su interior. La situación fue crítica, y los testimonios de quienes vivieron el horror de ese día revelan la angustia y el miedo que se apoderó de la comunidad.
La llegada de los bomberos y la policía fue crucial en la operación de rescate. Según el intendente de la Policía Local de Gandia, los equipos de emergencia encontraron a numerosos vecinos pidiendo auxilio. En total, seis personas fueron rescatadas, incluyendo a una madre y su hijo que se encontraban en una situación desesperada. Sandra, una testigo del incidente, relató cómo vio a una mujer con el cabello en llamas, pidiendo ayuda junto a su niño. Afortunadamente, ambos lograron salir del edificio por sus propios medios, aunque no sin sufrir graves consecuencias.
Entre los heridos, destaca el caso de una mujer de 62 años que fue rescatada por los bomberos tras haber sufrido quemaduras y una intoxicación por inhalación de humo. Esta mujer fue trasladada al Hospital La Fe de Valencia, donde su estado fue reportado como «reservado». La rapidez con la que se extendieron las llamas fue alarmante, afectando a toda la fachada del edificio de cuatro plantas, lo que complicó aún más la situación para los residentes.
### La Lucha por la Supervivencia
Los relatos de los vecinos rescatados son desgarradores. Mariví, otra de las residentes, se despertó por el humo y el ruido del incendio. Al darse cuenta de que no podía escapar, se refugió en el balcón trasero de su vivienda, que se convirtió en un salvavidas. «Hemos pasado mucho miedo», confesó Mariví, quien tuvo que buscar un alojamiento alternativo mientras se evalúa la seguridad del edificio. La incertidumbre sobre el futuro de su hogar es palpable entre los afectados.
Otra vecina, que también se refugió en su balcón, relató que el fuerte olor a humo la despertó. A pesar de haber estado tosiendo durante horas, no necesitó ser trasladada al hospital, lo que contrasta con la gravedad de otros casos. La comunidad se encuentra en estado de shock, y muchos aún no saben si podrán regresar a sus hogares.
El incendio ha dejado una profunda huella en la comunidad de Gandia. Las escenas de pánico y desesperación se han convertido en un recuerdo imborrable para quienes vivieron el suceso. La respuesta rápida de los servicios de emergencia ha sido fundamental para evitar una tragedia mayor, pero las secuelas emocionales y físicas del incendio perdurarán en el tiempo.
### Respuesta de Emergencia y Prevención
La rápida intervención de los bomberos y la policía ha sido elogiada por los vecinos, quienes reconocen que sin su valentía y profesionalismo, el número de víctimas podría haber sido mucho mayor. Sin embargo, este incidente también ha puesto de relieve la necesidad de mejorar las medidas de prevención y seguridad en edificios residenciales, especialmente en áreas con alta densidad poblacional como la playa de Gandia.
Las autoridades locales han comenzado a evaluar la estructura del edificio afectado y han prometido investigar las causas del incendio. La comunidad espera que se tomen medidas para evitar que un evento similar vuelva a ocurrir en el futuro. La seguridad de los residentes debe ser una prioridad, y es esencial que se implementen protocolos de emergencia más efectivos.
El incendio en Gandia es un recordatorio de la fragilidad de la vida y la importancia de estar preparados para enfrentar situaciones de crisis. La solidaridad entre los vecinos ha sido evidente, y muchos se han ofrecido para ayudar a aquellos que han perdido sus hogares. En momentos de adversidad, la comunidad se une para apoyarse mutuamente, demostrando que la esperanza y la resiliencia pueden prevalecer incluso en las circunstancias más difíciles.