Los trabajadores de los servicios de tierra de Ryanair han anunciado una serie de huelgas que comenzarán el 15 de agosto en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Esta medida de protesta, convocada por los sindicatos UGT y CGT, se debe a las sanciones impuestas a los empleados y al abuso de horas complementarias. La huelga se extenderá a lo largo del año, afectando a los pasajeros en pleno verano y durante varios fines de semana.
Las fechas de huelga están programadas para los días 15, 16 y 17 de agosto, coincidiendo con un puente festivo, así como los fines de semana del 23-24 y 30-31 de agosto. Además, las protestas continuarán en septiembre, octubre y noviembre, con paros programados para el 6-7 y 13-14 de septiembre, el 11-12 de octubre, y el 1-2, 8-9, 20, 21, 27, 28 y 31 de diciembre.
Ante esta situación, la organización no gubernamental Facua ha advertido a los pasajeros afectados que tienen derecho a compensaciones de hasta 600 euros, así como a la devolución del importe del billete y los gastos adicionales en caso de cancelación de vuelo. Esto se enmarca dentro del Reglamento Europeo 261/2004, que establece las compensaciones que deben recibir los pasajeros en caso de cancelaciones o retrasos significativos.
El reglamento menciona que los pasajeros tienen derecho a una compensación de 250 euros para vuelos de hasta 1.500 kilómetros, 400 euros para vuelos intracomunitarios de más de 1.500 kilómetros, y 600 euros para vuelos de mayor distancia. Si un vuelo es cancelado con menos de 14 días de antelación, los pasajeros pueden elegir entre varias opciones: cambiar su vuelo sin coste adicional, solicitar una ruta alternativa o pedir un reembolso.
Ryanair ha establecido un proceso sencillo para solicitar reembolsos. Los pasajeros deben tener a mano su número de referencia de la reserva y su dirección de correo electrónico para enviar la solicitud a través de su portal web. La aerolínea se encargará de determinar si el pasajero tiene derecho a compensación según lo estipulado en el reglamento europeo.
Es importante tener en cuenta que si la cancelación del vuelo se debe a circunstancias fuera del control de la aerolínea, como huelgas de controladores aéreos o condiciones meteorológicas adversas, los pasajeros no tendrán derecho a indemnización. Sin embargo, si la cancelación es atribuible a Ryanair, los pasajeros podrán reclamar la compensación correspondiente.
Facua también recuerda que, en caso de cancelaciones cercanas al horario de salida, las aerolíneas están obligadas a proporcionar comida y refrescos suficientes, así como alojamiento si es necesario. Esto incluye el transporte desde el aeropuerto hasta el hotel, si se requiere.
Los pasajeros que se vean afectados por las huelgas deben estar informados sobre sus derechos y las opciones disponibles para minimizar las molestias. La situación en Ryanair es un recordatorio de la importancia de conocer las normativas que protegen a los consumidores en el sector aéreo, especialmente en momentos de crisis como huelgas y cancelaciones masivas.
En resumen, los pasajeros de Ryanair deben estar atentos a las fechas de huelga y a sus derechos en caso de cancelaciones. La información proporcionada por Facua y el cumplimiento del Reglamento Europeo 261/2004 son herramientas clave para que los viajeros puedan gestionar adecuadamente cualquier inconveniente que surja durante su experiencia de vuelo.