En el sur de la provincia de Ávila, en la comunidad autónoma de Castilla y León, se encuentra un rincón natural que se convierte en el refugio perfecto para quienes buscan escapar del calor estival. El Pozo de las Paredes, ubicado en el término municipal de Navacepeda de Tormes, es una piscina natural que no solo ofrece aguas cristalinas, sino que también está rodeada de historia y leyendas que la hacen aún más especial.
Este paraíso natural se sitúa a aproximadamente dos kilómetros y medio del núcleo urbano de Navacepeda de Tormes, un pequeño pueblo con apenas 220 habitantes. El río Barbellido, que fluye por la zona, forma esta magnífica piscina justo antes de unirse al cauce del Tormes. Las aguas que la alimentan provienen de la Sierra de Gredos, lo que garantiza su frescura y pureza, convirtiéndola en un lugar ideal para refrescarse durante los días más calurosos.
El Pozo de las Paredes no es solo un lugar para nadar; su entorno está marcado por impresionantes paredes rocosas que han sido moldeadas a lo largo de miles de años. Estas formaciones geológicas no solo ofrecen un paisaje espectacular, sino que también crean un ambiente acogedor y protegido para los visitantes. Sin embargo, lo que realmente distingue a este lugar es el puente medieval que se alza sobre la piscina. Esta robusta construcción de granito, que data de la Edad Media, ha sido un símbolo de la localidad y un testigo silencioso de la historia del pueblo.
Además de su belleza natural y su valor histórico, el Pozo de las Paredes está envuelto en un halo de misterio. Las leyendas locales cuentan que en este lugar habitan hadas que solo se hacen visibles el día de San Juan, lo que añade un toque mágico a la experiencia de visitar la piscina. Este aire de enigma atrae a muchos excursionistas y amantes de la naturaleza, quienes se sienten atraídos no solo por la posibilidad de un baño refrescante, sino también por la oportunidad de explorar un lugar lleno de historias y mitos.
Para aquellos que deseen visitar el Pozo de las Paredes, el acceso es bastante sencillo. Desde Madrid, se puede llegar en poco más de dos horas. La ruta comienza tomando la A-6 y luego se conecta con la AP-6 hasta llegar a Villacastín. Desde allí, se toma la AP-51 y se rodea la ciudad de Ávila por la AV-20. Finalmente, se sigue la N-502 y se circula por la AV-941, que lleva directamente a Navacepeda de Tormes. Una vez en el pueblo, se puede iniciar una corta y fácil ruta de senderismo que conduce hasta la piscina natural.
Este enclave no solo es ideal para los amantes de la naturaleza, sino que también es perfecto para familias que buscan una actividad al aire libre. La ruta es accesible y permite disfrutar de un día en contacto con la naturaleza, lejos del bullicio de la ciudad. La combinación de un entorno natural impresionante, la posibilidad de un baño refrescante y la historia que rodea al lugar lo convierten en un destino atractivo para cualquier época del año.
En resumen, el Pozo de las Paredes en Navacepeda de Tormes es un destino que ofrece mucho más que una simple piscina natural. Es un lugar donde la historia, la naturaleza y la leyenda se entrelazan, creando una experiencia única para quienes deciden visitarlo. Ya sea para un día de excursión o para una escapada de fin de semana, este rincón de Ávila promete momentos inolvidables en un entorno de ensueño.